Félix U. Gómez, héroe olvidado del Carrizal

**Fue general en la batalla del Carrizal, cerca de Villa Ahumada, en que triunfaron los mexicanos contra los invasores estadounidenses.


Félix U. Gómez, héroe olvidado del Carrizal

La Crónica de Chihuahua
Mayo de 2012, 10:45 am

Por Froilán Meza Rivera

Chihuahua, Chih.- Un busto y un monumento, olvidados en un rincón del Paseo Bolívar, dan cuenta de la única batalla victoriosa de aquellas jornadas, que el 21 de junio de 1916 presentó el Ejército Constitucionalista contra los estadounidenses invasores de la Expedición Punitiva contra Francisco Villa.

El general triunfante se llamaba Félix U. Gómez, y es un héroe olvidado, al que los miembros de la Unión de Tipógrafos Chihuahuenses rindieron homenaje con la erección de una columna triunfal que pagaron por suscripción popular.

Tropas mexicanas se enfrentaron aquel día a los soldados de la Expedición Punitiva en el pequeño poblado de El Carrizal a 140 kilómetros al sur de Ciudad Juárez. A pesar de su inferioridad numérica, los mexicanos obtuvieron la victoria, aunque murió en combate el general Félix U. Gómez. Los 22 prisioneros invasores fueron conducidos a Chihuahua y después entregados a las autoridades norteamericanas en El Paso, Texas.

La primera piedra del monumento de cantera, fue colocada el 16 de septiembre de 1918 -estando todavía frescos en la memoria los sucesos-, siendo gobernador del estado el general brigadier Ignacio C. Enríquez, y fue terminado el 21 de diciembre de ese mismo año.

El monumento quedó frente al antiguo local de la Sociedad Chihuahuense de Estudios Históricos, justo atrás de la Quinta Touché y enfrente de la Preparatoria Allende.

Por la terquedad del capitán norteamericano Boyd, al mando de una unidad de la expedición militar invasora, de querer pasar a Villa Ahumada, Chihuahua, fue como se originó esa batalla. Existían acuerdos entre Estados Unidos y el gobierno de Venustiano Carranza, de no transponer ciertos límites territoriales.

El general Félix U. Gómez, jefe de las fuerzas constitucionalistas trató de persuadir a Boyd para que no pasara más al sur, según los acuerdos existentes. Pero altanero, el jefe de la partida estadounidense manifestó deseo de hacerlo "sobre las balas". En la batalla el mando pasó a manos del teniente coronel, Genovevo Rivas, quien logró la victoria a favor de las fuerzas nacionales.