Halcón aplomado, víctima de la agricultura de depredación

**La apertura ilegal de más de 8 mil hectáreas a la agricultura en el Valle de Tarabillas, provocó un desastre ambiental.

La Crónica de Chihuahua
Febrero de 2012, 00:10 am

Por Froilán Meza Rivera

Ahumada, Chih.- Una nueva víctima del desmonte que realizan con fines agrícolas los menonitas en el Valle Tarabillas, es el halcón aplomado, especie en peligro de extinción. El aplomado se encuentra entre varias especies animales cuyo hábitat está siendo destruido por la apertura ilegal de más de 8 mil hectáreas para explotación agrícola en esta zona.

Así lo denunció el conservacionista Manuel Bujanda Rico, quien señaló que en días pasados, los fuegos con que se abren paso los menonitas en las llanuras de Tarabillas, puso en peligro varios nidos de halcón aplomado que están siendo monitoreados y estudiados por el Proyecto Peregrino, financiado por la organización The Peregrine Fund.

Asimismo, se reportó el robo de dos polluelos por parte de nuevos colonos de este valle, y se anunció que se interpondrá una nueva denuncia ambiental por la depredación que están haciendo los agricultores de éste, que es el hábitat natural también del berrendo, mamífero exclusivo de Norteamérica y que está en peligro de extinción.

En años recientes, la expansión de la frontera agrícola de la comunidad menonita en Chihuahua ha representado la pérdida de hábitat clave para especies de animales señaladas por las normas oficiales como especies bajo protección, amenazadas o en peligro.

De acuerdo al ambientalista Manuel Bujanda, dicha expansión se puede ver, entonces, como un verdadero ecocidio, desde el punto de vista de la interacción de los menonitas con los ecosistemas.

Además, el establecimiento de un centro de población menonita en dicho lugar ya dio como resultado la interrupción del tránsito de las distintas especies animales, de mamíferos, reptiles y aves que utilizaban este lugar como corredor, ya que se encuentra en la parte más estrecha de un valle.

El también catedrático de la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales de la UACH, denunció que en este caso particular de Tarabillas, con la conversión de más de 8 mil hectáreas de terreno de pastizal a uso agrícola, se provocó además la pérdida del suelo y de su capa vegetal, y se facilita el avance del proceso de desertización.

En cuanto al halcón aplomado, esta ave prefiere los campos donde la vegetación no es muy alta, así como las sabanas, llanos y pastizales de ganado. Emplea los nidos abandonados de otras aves: cuervos y otras rapaces. Deposita los huevos en el suelo o en el fondo del lugar seleccionado sin añadirle material al sitio, y la nidada consiste de uno a tres huevos color crema o azulosos con manchas castañas rojizas. La incubación toma de 31 a 32 días. Los pichones se van del nido de las cuatro a cinco semanas.