Intelectuales se rebelan contra el derribo de la Casa Redonda

**Deciden formar valla humana intermitente, y apelar al buen juicio de los empresarios del Centro de Convenciones.


Intelectuales se rebelan contra el derribo de la Casa Redonda

La Crónica de Chihuahua
Junio de 2014, 19:50 pm

Chihuahua, Chih.- La historia de la Casa Redonda, hoy museo de arte, es la historia del comodato mediante el cual un movimiento social y cultural rescató este edificio de la inminente destrucción.

Para contrarrestar este segundo intento de dañar el edificio, un grupo de intelectuales se rebeló y se constituyó en una especie de valla humana intermitente, con la fuerza moral que les otorga sus respectivas trayectorias en el mundo de las letras, las artes, la cultura en general, y están apelando a los empresarios del Centro de Convenciones, para detener esta ofensiva.

Y es que desde hace ya tres días, maquinaria pesada ha estado derribando el barandal metálico que protegía a la Casa Redonda Museo Chihuahuense de Arte Contemporáno, con la intención de ampliar el área de estacionamiento del Centro de Convenciones y Exposiciones.

El doctor Arturo Rico Bovio, quien encabezó hace ya 14 años los esfuerzos para rescatar este inmueble, recordó hoy que cuando parte de las instalaciones de la vieja estación de los Ferrocarriles Mexicanos fue cedida para formar el Centro de Exposiciones, se formó un fideicomiso, en el cual se incluyó el terreno y las instalaciones de la Casa Redonda, que se destinaron a museo. "Siempre quedó bien especificado que la Casa Redonda tenía su terreno, más una franja en la parte posterior, y que le iban a pertenecer".

El filósofo destacó el hecho de que el terreno vacío actual, iba a ser destinado para bodegas para las obras de arte, oficinas administrativas, cafetería y otras instalaciones, pero el proyecto inicialmente no se pudo completar por la premura de rescatar el inmueble básico antes de que terminara el sexenio de Ernesto Zedillo, para poder aprovechar los recursos.

"Los proyectos están hechos", sentenció. "Y ahora que el Centro de Convenciones se está ampliando a costa de la Casa Redonda, demoliendo las bardas, se olvidan de que se trata de patrimonio del estado, legalmente respetable como cualquier otra propiedad".

Ahora se necesita, dijo, "un pronunciamiento político" con el que se dé marcha atrás a esta barbarie.