Afecta sequía a las presas del estado

**Varias, al 15% de su capacidad. **Pero lo peor, según productores agrícolas, que desde finales del año pasado, es que los afluentes que las alimentan, los ríos, tampoco llevan agua

La Crónica de Chihuahua
Abril de 2013, 18:31 pm

Chihuahua.- De acuerdo a las más recientes mediciones de la Comisión Nacional del Agua, las diez presas de mayor contención de agua procedente de los principales aprovechamientos superficiales en Chihuahua presentan las capacidades más bajas de los últimos seis años.

Incluso algunas no llegan ni al 15 por ciento de su capacidad total.

Y lo peor, según detallan productores agrícolas desde finales del año pasado, es que los afluentes que las alimentan, los ríos, tampoco llevan agua.

En el ejemplo, el Río Conchos, que alimenta la presa La Boquilla, condujo a mediados del año pasado apenas la quinta parte del líquido promedio que arrastró durante el 2008, pero este año, en el primer trimestre, prácticamente el arrastre de agua es nulo.

En el 2008, el Conchos llevó 2 mil 800 millones de metros cúbicos de agua a la presa, casi 17 veces la cantidad que se consume en un año en Ciudad Juárez, aproximadamente 160 millones de metros cúbicos.

Empero, el año pasado este río contribuyó con apenas 500 millones de metros cúbicos a La Boquilla, poco más de tres veces el agua que se consume en un año en esta frontera.

La capacidad de traslado de agua del río Conchos a La Boquilla se redujo en cuatro años un 83 por ciento. Esto repercutió, de acuerdo con los distritos de riego alrededor, en que los cultivos perennes presentaran una reducción en la producción.

En el caso del río San Pedro, que desemboca en la presa Francisco I. Madero, el volumen escurrido acumulado cada año entre 2008 y 2012 se redujo casi un 90 por ciento. La acumulación de agua pasó de los 940 millones de metros cúbicos, aproximadamente, a los 110 millones. Esto significa que a esa presa le llegaba casi veces seis veces el agua que consume Juárez en un año, pero hoy Juárez podría darle agua a esa presa, y no al revés.

Lo grave, según estudios de los distritos de riego adscritos a la Comisión Nacional del Agua, es que las probabilidades de lluvia para 2013 son al menos un 40 por ciento inferiores que el año pasado.

De acuerdo con las mediciones de la Conagua, la presa La Boquilla tenía en enero de 2009, tres mil millones de metros cúbicos. En enero pasado su nivel se estableció en mil millones de metros cúbicos, por lo que se ha reducido dos terceras partes.

La presa Francisco I. Madero tenía una capacidad de 450 millones de metros cúbicos en julio del 2006. En enero registró un nivel de 120 millones. Perdió casi el 75 por ciento de su agua.

La Luis León alcanzó su máximo en enero del 2009, cuando reportó 800 millones de metros cúbicos. En enero pasado apenas alcanzó los 350 millones de metros cúbicos. Se encuentra al 43 por ciento de su capacidad.

La San Gabriel está en un nivel crítico: pasó de los 300 millones de metros cúbicos a los 50 millones, lo que se considera prácticamente un secante en materia de captación de agua en vasos contenedores naturales cuando se pierde más del 90 por ciento de la capacidad total. A San Gabriel le caben hasta 350 millones de metros cúbicos.

La otra presa en grave riesgo es El Tintero, que presenta un disminución del 85 por ciento. Tiene actualmente 22 millones de metros cúbicos, y su capacidad es de 140 millones.

Las Lajas, de la que depende la agricultura en Buenaventura, Riva Palacio y parte de Ahumada, presenta un déficit de casi 92 por ciento de su capacidad total estimada en 100 millones de metros cúbicos. Actualmente no tiene ni 17 millones de metros cúbicos.

Las presas Abraham González y Pico de Águila, desde diciembre de 2010 no retienen más agua de la que reciben.