Sensibles feminicidios de 2014 carecen de evidencia para resolverse

**Son los caso de Lizeth Berenice y de Esperanza Chaparro, sobre los cuales no recae todavía ni el perfil de un culpable, ni avances significativos, a más de un año de los crímenes.

La Crónica de Chihuahua
Marzo de 2015, 20:07 pm

Chihuahua, Chih.- Dos de los feminicidios más sentidos en el 2014, casos de Esperanza Chaparro Sáenz y Lizeth Berenice Chavira Arenas, no tienen todavía ni el perfil de un culpable, ni avances significativos, a más de un año de los crímenes.

Ambos casos tienen un antecedente en común: les fueron borradas las evidencias.

El titular de la Fiscalía Especializada de Investigación de Delitos Contra Mujeres por Razones de Género, Ernesto Jáuregui, mencionó que ambos casos son igual de complicados, pero hay un factor más complejo en el de Berenice.

Explicó que, en el caso de Esperanza Chaparro, la escena fue un lugar apartado, donde se borró la evidencia. Se le localizó después de mucho tiempo de su desaparición, lo que ha complicado la investigación; "no obstante, está muy avanzada", dijo.

En el caso de Berenice hay factores que han hecho más compleja la investigación, porque quienes cometieron el hecho procuraron borrar evidencia y una serie de cosas, aseguró el funcionario.

Esperanza Chaparro desapareció el pasado 26 de enero del 2014 y fue localizada muerta el 2 de marzo en una zona despoblada, en la Sierra de Nombre de Dios. La causa de su fallecimiento fue traumatismo cráneo-encefálico.

Lizeth Berenice desapareció el 14 de febrero del 2014 y apareció muerta dos días después, en unas tapias de la colonia Nuevo Triunfo.

La FEM realizó 12 cateos en el mismo número de domicilios en la zona norte de la ciudad, de acuerdo con una fuente extraoficial. Agentes ministeriales acudieron a diferentes direcciones y revisaron 12 casas en busca de evidencia que los pudiera llevar a dar con el paradero de él o los responsables.

La investigación del asesinato de Berenice inició un mes y 22 días después de la de Esperanza.