Adultos Mayores, damnificados del neoliberalismo

Reportaje especial, tomado de la revista Buzos de la Noticia

La Crónica de Chihuahua
Diciembre de 2015, 13:09 pm

Los adultos mayores en México, al igual que los de otros países subdesarrollados, figuran entre los principales damnificados de un modelo de producción depredador que después de explotarlos indiscriminadamente les cierra las puertas y los arroja a la calle con una mísera pensión o un apoyo asistencialista que no solucionan sus adversas condiciones de vida en la vejez.

Cuando Juan López Hernández, arquitecto de profesión, abandonó el sistema productivo laboral a los 64 años de edad, decidió dedicarse a una tarea que metafóricamente describe como “enseñar a pescar a otros mexicanos mayores de 60 años, para que no tengan que andar pidiendo pescados para sobrevivir”.

Juan es un activista que se dedica a informar a otros adultos mayores que “legalmente tienen derecho a no ser discriminados por razón de su edad y que cualquier edad usada para señalar un final al camino de la vida laboral es una frontera autoritariamente impuesta, que sirve para marginar, estigmatizar y desechar al individuo de la vida activa económica y productiva, sin tomar en cuenta que configuran un sector de la población en crecimiento constante tanto en México como en el mundo”.

“Esta sociedad globalizada –dijo a Buzos el también presidente de la Coordinación Nacional de la Edad de Oro A. C.– ha sido preparada para asumir una actitud negativa de rechazo hacia las personas adultas mayores, buscando despojarlos de sus derechos humanos fundamentales, de su patrimonio, haciéndolos pasar como sujetos ineptos, inservibles, despojos de la economía, personas inferiores al resto de la población.

“Al adulto mayor se le hace ver como una carga; es marginado por la sociedad, en el trabajo, en las instituciones y también en la familia. Le cierran las puertas y ya no siente que esté aportando a la solución de los problemas externos e internos; por eso se siente inútil, y esto baja su autoestima; empiezan a generarse una serie de problemas de salud, primero emocionales, luego fisiológicos”, indicó López Hernández.

Hoy se prepara una reforma pensionaria ordenada por el sistema financiero trasnacional, supervisada en México por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que encabeza el mexicano José Ángel Gurría; la finalidad de esta reforma es incrementar paulatinamente la participación del trabajador en la integración de su fondo de pensión, que al mismo tiempo que desliga al Estado de sus responsabilidades con éste, pretende entregar a las corporaciones financieras el manejo administrativo y financiero del mismo. El objetivo final de la reforma es que el propio trabajador termine por hacerse cargo del financiamiento de su pensión con sus propios ingresos.

Así, el neoliberalismo impulsa una alocada y desproporcionada producción, bajo la exigencia de mayor explotación laboral al trabajador cuando es joven y la segregación cuando llega a la vejez, dándole el trato de una maquinaria depreciada o un desecho industrial.

Doblemente damnificados

La señora Margarita Olmedo Badía es voluntaria y está encargada de atender a los 110 adultos mayores (88 mujeres y 22 hombres), instalados en el Hogar Marillac, una asociación civil que brinda asistencia social a personas mayores en Naucalpan, Estado de México.

“Las cosas están complicadas por la economía y por la propia familia, que no sólo debe trabajar el hombre sino también la mujer; entonces, dejan al anciano solo en una casa, lo tienen que abandonar gran parte del día. Los miembros de la familia suelen llegar hasta la noche, y durante ese lapso no saben qué problemas ha tenido el ancianito y si cubrió sus necesidades básicas”, dijo doña Margarita.

Sin embargo –añadió– los problemas de atención social a los adultos mayores se multiplicarán aún más en el futuro porque este segmento de la población crece día a día. “Antes las personas vivían 65 años, ahora, mínimo, 75 o hasta más. Hay personas que llegan a vivir hasta 90 o 100 años. Estamos en una situación diferente, y se necesita de un ingreso, de una pensión, por ejemplo, como la del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que aunque es muy pequeña, al menos la tienen.

Sin embargo, también es cierto que no pueden dar en el hogar para todos sus gastos. En un futuro, con lo que estamos viendo de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), ya no va a haber una pensión respetable para nadie. Tenemos aquí el caso de un señor que fue machetero en un camión de entregas, con familia, hijos. ¿Cuánto pudo ahorrar para hacerse de una pensión si no tenía IMSS?”.

Ilegal discriminación

De acuerdo con datos del Censo de Población del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), en 2010 había 10 millones 100 mil adultos mayores de 60 años en el país. El 53.5 por ciento de ese total eran mujeres. La mayoría tiene dificultades para conseguir trabajo debido a su edad y deben tolerar maltratos, tanto por parte de autoridades como de sus propios familiares.

En su nueva etapa productiva como adulto mayor, el arquitecto José Juan López Hernández ofrece cursos en Toluca, Estado de México, en otras poblaciones de esta entidad y en el Distrito Federal, dirigidos a adultos mayores y a personas interesadas en general.

“Estamos en la Red de Vinculación Laboral para demandar que se abran espacios laborales para los adultos mayores, porque podemos generar todavía y no ser una carga; que se abran los espacios, porque es ilegal discriminar a una persona por razón de su edad, eso es completamente ilegal. Por ejemplo, vemos en los anuncios laborales que se busca una persona entre 20 y 45 años; eso es completamente ilegal, no puede discriminarse a nadie por razón de su edad.

“Lo que hemos demandado es que nos abran espacios, pero de acuerdo con nuestra experiencia, con trabajos dignos; porque no es posible que una persona, por ejemplo, una que yo conozco, quien incluso ganó un concurso de oratoria en una institución bancaria, solamente le den trabajo como cerillo en una tienda departamental. Digo, no es posible desperdiciar tanto talento, tanta experiencia, tanto conocimiento; todo eso se está tirando a la basura”, señaló López Hernández, quien resalta la importancia de otorgar oportunidades de empleo para los adultos mayores y brindar atención especializada a aquellos que ya no puedan laborar.

Transición demográfica

Investigaciones internacionales recientes han puesto en evidencia que hay una “transición demográfica” en proceso, lo que significa que la población actualmente está pasando de una mayoría joven a una en la que el sector de los adultos mayores crece. En términos internacionales, hacia 2050, las personas en esas edades representarán un quinto de la población mundial, equivalente a 10 veces la cantidad de adultos mayores que había en 1950.

El pasado 1º de octubre de 2015 se conmemoró el Día Mundial de las Personas de Edad, conforme lo estableció la resolución 45/106 de la Asamblea General de las Naciones Unidas realizada el 14 de diciembre de 1990. El Fondo de Población de las Naciones Unidas y la agrupación internacional HelpAge International, dieron a conocer el Índice AgeWatch Mundial 2015 en el cual se aplicaron 13 criterios para describir las condiciones en las cuales se desarrollan los adultos mayores de 96 países, entre ellos México; el primer sitio lo ocupó Suiza; en el nueve, Estados Unidos; en el 33 (tres espacios por debajo del lugar alcanzado en 2014).

Con esto se anticipa que el envejecimiento de la población pudiera llegar a incidir en la transformación de las economías y sociedades del mundo, dada la necesidad de crecientes recursos para el sostenimiento de las condiciones de vida de este sector poblacional. En los resultados del estudio puede observarse una disparidad en las condiciones de vida de las personas adultas mayores, incluso en Estados Unidos, país que se ubicó en el segundo lugar en materia de educación y empleo, pero que ocupa el lugar 36 en cuanto a seguridad de ingresos, por debajo de países como Hungría, Uruguay y Albania.

En Estados Unidos se calcula que la población de adultos mayores pase de los 40 millones que tenía en 2009 a 72 millones en 2030, prácticamente el doble de los que tuvo en el año 2000. Como muestra de una creciente desigualdad social en EE. UU. con respecto a este grupo social, está el descenso del sitio ocho alcanzado en 2014 al lugar nueve en el ranking de 2015.

Por lo que respecta al resto del Continente Americano, datos de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) y de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indican que hay 150 millones de personas mayores de 60 años y se calcula que en 2020 habrá por lo menos 200 millones. De acuerdo con la OPS, la mitad de estos adultos mayores de la región, entre los que se incluye México, carecen de recursos suficientes para sostener sus necesidades básicas diarias.

La población mundial envejece

Los datos sobre los adultos mayores de la organización HelpAge International señalan que en este año existen 901 millones de personas adultas mayores en el planeta, cantidad que representa 12.3 por ciento de la población mundial y se estima que en el año 2030 habrá mil 402 millones, que equivaldrán al 16.5 por ciento; mientras en 2050 serán dos mil 92 millones, equivalentes al 21.5 por ciento de la población del orbe. Sobre las expectativas de México se indica que este año 9.6 por ciento de la población tiene 60 años o más; en tanto en el año 2030 el porcentaje será de 14.9 por ciento y en 2050 de 24.7 por ciento.

“La población mundial está envejeciendo. A medida que la tasa de fecundidad disminuye y la esperanza de vida aumenta, se espera que la proporción de personas de 60 años y más aumente en todas las regiones del mundo. Sin embargo, las experiencias de vida de los mayores varían mucho según en qué país viven.

”Envejecer es una experiencia que todos vamos a experimentar. Actualmente, en todos los países del mundo, la población de más de 60 años es el grupo etéreo de mayor crecimiento (grupo humano de la misma edad separado del total para mostrar una información). Este hecho afecta de manera profunda nuestra economía, nuestras formas de vivir y nuestras aspiraciones personales y profesionales.

A pesar de que no siempre se ve de esta manera, el envejecimiento demográfico global es la mayor historia de éxito del desarrollo humano, surgida como resultado de la reducción de la tasa de fecundidad y el incremento de la esperanza de vida. Sin embargo, no todos los gobiernos han implementado aún los marcos necesarios para responder a los desafíos que representa el envejecimiento de su población”.

Respeto a convención

Organizaciones sociales defensoras de derechos humanos y especializadas en asuntos de los adultos mayores, están demandando al Senado y al Gobierno de las República la ratificación de la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos de las Personas Mayores, aprobada el 15 de junio por el pleno de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

La citada convención hace referencia a los derechos fundamentales de las personas adultas mayores en 40 artículos, en los que se define a éstos como las personas con más de 60 años de edad y que son sujetos de derecho a ser protegidos, reconocidos y respetados en sus garantías individuales en igualdad de condiciones con otros miembros de la población.

Define que debe abatirse la discriminación por motivo de la edad, abandono, y el derecho a un envejecimiento digno, activo y saludable; participación comunitaria, no ser sometido a tratos degradantes y tratos crueles; tomar decisiones en términos de su salud; libertad personal, de expresión, información, nacionalidad, circulación, a la privacidad, acceso a la educación, cultura, deporte, esparcimiento, vivienda, medio ambiente sano, así como a los derechos fundamentales de acceso a la seguridad social y al trabajo.

Organizaciones integradas al Comité Intersectorial México por la Convención de los Derechos de las Personas Adultas Mayores, en la que participan la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Instituto para la Atención de los Adultos Mayores en el Distrito Federal, la Escuela Nacional de Trabajo Social de la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto para la Atención de los Adultos Mayores en el Distrito Federal y diversas agrupaciones civiles, demandaron al Senado la ratificación de tal convención internacional.

Derivado de lo anterior, el pasado 27 de octubre, el Senado solicitó al Presidente de la República, titular del Poder Ejecutivo Federal, que se efectuara esa ratificación; y el 4 de septiembre de 2015, la OPS y la Cepal hicieron la misma convocatoria, señalando que la citada convención es el primer tratado de derechos en su tipo.